viernes, agosto 24, 2007

Juventudes nacionalistas de CiU exigen la ruptura con los democristianos “ultraconservadores” de UDC

Article del plural

El desconcierto se impone en el seno de CDC, el partido fundado por Jordi Pujol y liderado ahora por Artur Mas. Mientras dirigentes de la Joventut Nacionalista de Catalunya (JNC), la organización juvenil convergente, anunciaban que en el próximo congreso de su partido piensan exigir la ruptura de este con la democristiana UDC, a la que calificaron de “ultraconservadora”, ha trascendido que un destacado dirigente nacionalista, el diputado autonómico Francesc Homs, se ha reunido recientemente con el ex president de la Generalitat, Pasqual Maragall, para interesarse por su proyecto político basado en la creación y promoción, a nivel del conjunto de la Unión Europea, del Partido Demócrata.
Las informaciones sobre la reunión de Francesc Homs con Pasqual Maragall fueron filtradas a los medios de comunicación desde el ámbito convergente. El mismo Francesc Homs incluso se sumó a ellas al subrayar supuestas “complicidades ideológicas” con Maragall. Desde un medio tan próximo a CDC como el diario Avui se ha querido dar mayor trascendencia a lo que sólo ha sido una reunión privada entre un ex president Maragall particularmente activo y un Francesc Homs que quiere recuperar protagonismo público encabezando un proyecto de renovación de CDC.

Superar la pugna derecha-izquierda
Para CDC resulta inquietante observar cómo en Cataluña se impone la división clásica entre derecha e izquierda, lo que le ha condenado a pasar a la oposición desde que el mismo Pasqual Maragall presidió el Gobierno de la Generalitat con el tripartito de las izquierdas catalanistas, reeditado luego con José Montilla como president. No es extraño que desde CDC se contemple al futuro Partido Demócrata Europeo como una posible forma de superar la pugna entre derecha e izquierda.

El desconcierto convergente
Mientras prosiguen las querellas entre CDC y UDC, protagonizadas por Artur Mas y Josep-Antoni Duran Lleida, y mientras aumenta cada día la pérdida de poder institucional y político de CiU, el desconcierto convergente se impone. Francesc Homs parece querer olvidar ahora todo cuanto su formación política ha dicho en contra de Pasqual Maragall, en ocasiones incluso llegando a la pura y simple infamia. Lo hace mientras destaca que tiene “más proximidad política con Maragall que con ciertos sectores de ERC”. Mientras, la dirección de la JNC reniega de UDC, la acusa de “ultraconservadora” y apuesta por un entendimiento con ERC. Y es que, tras casi un cuarto de siglo de monopolio del poder en la Generalitat y después de casi cuatro años en la oposición, en CDC el desconcierto campa a sus anchas.

J.G.-S.